El fiscal departamental de La Paz, Edwin Blanco, afirmó ayer que en el proceso de investigación que se realiza en el caso en contra de Gabriela Zapata Montaño no se hallaron indicios de uso indebido de influencias, lo que liberaría de esta sindicación al presidente Evo Morales y a la empresa china Camce.
De acuerdo con la autoridad del Ministerio Público, durante las indagaciones se estableció que la querella instaurada en contra de la exgerenta del consorcio oriental se reduciría a la exjefa de la Unidad de Apoyo a la Gestión Social, Cristina Choque, y a Zapata Montaño por el uso de oficinas públicas.
“No hay indicios. En una teoría inicial hay una serie de indicios pero que han sido superados por otra teoría actual, entonces contra Camce todavía no tenemos nada. Mientras se va investigando se va afinando (...) Hay muchos contratos que han sido suscritos cuando Gabriela no trabajaba en Camce, por ahora no tenemos indicios contra ese tema”, afirmó el fiscal de Distrito.
Blanco adelantó sus conclusiones cuando la investigación todavía está en curso y no han sido citados a declarar ni los ejecutivos de la empresa china Camce ni los ministros de Estado ni otras autoridades del Gobierno que firmaron los contratos.
En febrero, el periodista Carlos Valverde denunció la existencia de un supuesto tráfico de influencias que implicaría al presidente Evo Morales, porque su expareja Gabriela Zapata,con quien tuvo un hijo, en ese entonces era gerente Comercial de Camce que se adjudicó contratos con el Estado por 570 millones de dólares.
Ante la denuncia, se iniciaron tres investigaciones: en la Contraloría, en la Asamblea Legislativa y el Ministerio Público para determinar la veracidad de la acusación.
En la Fiscalía, se procedió con la investigación por una querella planteada por el Ministerio de Transparencia bajo los supuestos delitos de uso indebido de influencias en complicidad, legitimación de ganancias ilícitas y enriquecimiento ilícito de particulares con afectación al Estado.
El hecho se sustentó en que Zapata Montaño, sin ser funcionaria de la Unidad de Gestión Social, visitó en más de 100 oportunidades esta repartición estatal dependiente del Ministerio de la Presidencia.
Bajo éste parámetro, Blanco insistió que por el ‘uso indebido de bienes del Estado (oficinas)’ se establece un tráfico de influencias sólo entre Zapata y Montaño.
VISITA DE OCHO DIPUTADAS
Una comitiva de ocho diputadas de Unidad Demócrata (UD) se presentó ayer en la cárcel de Miraflores para visitar a Gabriela Zapata. La jefa de esta bancada, Lourdes Millares, indicó que vio a la joven nerviosa y amedrentada por la situación que le toca vivir. Millares contó a Erbol que para lograr entrevistarse con Zapata tuvo obstáculos.
Las opositoras insistieron y lograron que una de ellas se pueda entrevistar con la joven detenida. Millares fue la encargada de conversar con la empresaria. “Ella está en una situación muy complicada, amedrentada, la propia presencia de la gobernadora ahí parada al frente de ella se constituye en un factor de presión”, manifestó. Relató que Zapata estaba nerviosa y expresó su preocupación porque pensó que la visita de las opositoras podía empeorar su situación. Según Millares, ratificó que algunas internas la quieren fuera del penal y que teme por su vida. La diputada anunció que hará seguimiento a este caso.
QUINTANA DEJÓ SU CELULAR EN LA FISCALÍA
Ministro: Denuncias se están cayendo a pedazos
El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, después de prestar su declaración informativa ayer ante la Fiscalía, en calidad de testigo, dijo que la acusación realizada en contra del presidente Morales, sobre el presunto uso indebido de influencias en beneficio de su expareja por la relación que tuvo, se está cayendo.
“Lo que pasa es que se está cayendo a pedazos la denuncia de tráfico de influencias contra el presidente Evo Morales. Se señaló para el referendo que el Presidente habría hecho tráfico de influencias en favor de la señora Zapata, eso, en cuestión de horas, días, poquísimas semanas para que se constatará que jamás hubo tráfico de influencias del presidente Evo en favor de la señora Zapata”, dijo en conferencia de prensa en Palacio de Gobierno.
Asimismo, sostuvo que en seis oportunidades Gabriela Zapata y sus abogados anunciaron que el uso indebido de influencias fue realizado por su persona y que presentarían pruebas del ilícito, pero que hasta la fecha no se efectivizó.
“Como eso se está cayendo a pedazos alguien tiene que hacer tráfico de influencias, entonces, es el Ministro de la Presidencia.
El abogado de Zapata, Eduardo León, entregó una carta rubricada por su cliente en la que acusa al Ministro de la Presidencia de mentir al presidente Evo Morales y de atentar contra el Estado.
Quintana negó cualquier relación con la expareja del presidente Morales y se puso a disposición de la Fiscalía.
Voluntariamente
Juan Ramón Quintana decidió presentarse de forma voluntaria ante el Ministerio Público para prestar declaraciones sobre el caso y poner a disposición su celular para que verifique el tráfico de llamadas, toda vez que Zapata y su abogado (León) afirmaron que existía una relación entre ambos y que tuvieron contacto telefónico hasta diciembre del pasado año.
“Voy a esperar pacientemente que el fiscal pueda hacer los requerimientos a la parte querellada para que el país se informe de lo que realmente está pasando”. También aclaró que la denuncia que presentó el Ministerio de la Presidencia en contra de Zapata Montaño fue por enriquecimiento ilícito de particulares con afectación al Estado y uso indebido de bienes.
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