Ejecutivos de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) presentaron denuncia ante el Ministerio Público contra funcionarios públicos y parientes de estos por uso indebido de influencias, además de los delitos relacionados a legitimación de ganancias indebidas.
Las personas acusadas son Selva C. G. y Ever T. F., funcionarios de almacenes YPFB Chaco, y la Unidad de Comunicación de la estatal petrolera, en ese orden.
Una vez presentada esa denuncia, YPFB solicitó el apoyo del Ministerio de Transparencia y Lucha Contra la Corrupción, para que participe en el proceso de investigación, en el marco de su competencia establecida en la Ley Marcelo Quiroga Santa Cruz.
Según el documento, el caso se encuentra en investigación en el Ministerio Público a solicitud de YPFB que coadyuva en el proceso de investigación.
En esta primera denuncia se encuentra involucrada Ericka R. R. quien era representante de la empresa Colibrí.
Asimismo, en la ciudad de Cobija fue aprehendido Guido A. T., quien mantenía comunicación cercana con la hermana de Selva C. G. y figuraba como propietario de una empresa vinculada a esta red de funcionarios y sus parientes.
En la lista de aprehendidos, también figuran Luis C., hijo de Selva C. G., quien participó junto a Yadilile B. E. en la adjudicación de contratos cercanos al medio millón de dólares.
Una segunda denuncia ampliatoria confirmaría la supuesta red de corrupción en contra de la familia de Selva C. G. dando cuenta de una serie de licitaciones, incluidas las de la unidad de Comunicación, adjudicadas a familiares y cercanos a estas personas.
Hasta el momento, las seis personas aprehendidas en la ciudad de Santa Cruz fueron remitidas a la ciudad de La Paz, debido a que la denuncia fue puesta en la sede de Gobierno.
Mediante un comunicado, YPFB da conocer su rechazo y asegura promover la investigación de dichas denuncias, “YPFB llevará el caso hasta dar con todas las personas involucradas y será implacable con los responsables de estos hechos irregulares”, concluye la nota difundida en los medios de comunicación.
En contraparte, la periodista Selva C. G. negó las sindicaciones y mucho menos estar implicada en una red de corrupción y mandó un mensaje al presidente de YPFB, Carlos Villegas.
“Me están trasladando porque están cometiendo una injusticia conmigo por algo que yo no hice. Quiero mandarle un mensaje a don Carlos Villegas, yo no soy culpable de nada, que investiguen la corrupción en Yacimientos primero”, expresó la ahora investigada, según ANF.
Por su parte, Erwin Tapia, abogado de Selva C., cuestionó el proceder de efectivos policiales, quienes habrían encañonado al hijo de Selva C. G. para poderla aprehender y trasladarla hasta la ciudad de La Paz. “Entraron a la casa para comenzar, para ubicarlo, lo detuvieron al hijo en la calle, lo subieron a punta de pistola a un vehículo, lo golpearon para que diga dónde está la madre”, manifestó Tapia.
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