Ante el anuncio de los fiscales, del caso Rózsa II, de citar al menos 30 personas para ampliar la investigación, uno de los abogados de los 22 imputados en denominado Rózsa I, Gary Prado, señaló que se trata de una actitud orientada a intimidar para fines represivos a los actualmente investigados.
Prado contextualizó que el caso se abrió a denuncia del Fiscal Marcelo Soza en septiembre 2010, el mismo que debió concluirse en marzo de 2012. "Aquí hay un absurdo jurídico. Los procesos de investigación tienen un plazo máximo, por la complejidad del caso, máximo como 18 meses. El exfiscal Soza, por su incapacidad de concluir con la investigación, abre la segunda fase sobre el mismo caso. Ahora estamos en abril 2014, pretenden seguir con un caso que tuvieron en la congeladora solo para fines represivos", señaló.
Acción desesperada. Víctor Hugo Velasco, presidente de la Asociación de Derechos Humanos, señaló que todas esas acciones forman parte de una campaña abierta a desprestigiar a los líderes cruceños.
Además, mencionó como muestra de ello el folleto bajo la mirada oficialista del caso Rózsa que fue distribuido en el evento de jóvenes del G-77. "Hay una desesperación absoluta del Gobierno tratando de sacar este tipo de informaciones y ahora con el anuncio que hacen los fiscales de citar a los cruceños. Eso es condenable, ya que de forma maliciosa con estas actitudes tratan de sembrar terror a los familiares", apuntó.
Dudas del caso. Según Prado, el anuncio de los fiscales Antonio Rodríguez, Sergio Céspedes y Javier Flores, sobre las citaciones a 30 personas, pone otra vez en incertidumbre a los familiares de los investigados del caso Rózsa I.
"Lo están utilizando para presionar sobre sus familias del caso uno y los empresarios cruceños. No se extrañe que dentro esos 30 esté Zvonko Matkovic o mi persona, para atemorizarnos", dijo.
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