El diputado de Unidad Demócrata, Rafael Quispe, denunció que la expareja del presidente Evo Morales, Gabriela Zapata, había gestionado su visa para Estados Unidos un mes y medio antes que fue detenida y acusada por más de 10 delitos, lo que confirma que pretendía huir del país.
Quispe dijo que presentará a la comisión de fiscales la documentación referida a la visa de Zapata y de una menor, para que se constituya en prueba de que la mujer tenía pretensiones de abandonar el país.
"(La visa) evidencia que la señora Gabriela Geraldine Zapata Montaño tenía intenciones de fugarse del país. La visa es para 10 años y no solo es de una persona. Estaba a punto de abandonar el país", declaró el asambleísta.
Quispe precisó que para la otorgación de una visa es necesario además presentar el pasaporte y los pasajes, documentos que son obvio que Zapata cumplió y por eso obtuvo el documento que autorizaba su ingreso a Estados Unidos.
La visa le fue expedida en fecha 7 de enero de 2016 y su duración es para 10 años, es decir, hasta el 5 de enero de 2026. "Nosotros responsables debemos presentar al Ministerio Público que no le pueden dejar libre. Hay varios riesgos procesales sobre la familia, el domicilio y el trabajo".
El legislador también mostró su extrañeza de por qué las autoridades no mostraron esta documentación para argumentar los riesgos de fuga y las razones para su detención actualmente en la cárcel de Miraflores.
También cree que Zapata ya sabía que por los delitos que estaba cometiendo como falsedad ideológica y material, enriquecimiento ilícito, además de negociados desde la secretaría de Gestión Social dependiente del Ministerio de la Presidencia, podía ser detenida. "Pero algo falló", dijo Quispe.
Zapata fue detenida después del referéndum constitucional del 21 de febrero, conjuntamente abogados y familiares de cariño presuntamente suplantaron a un supuesto hijo del presidente Evo Morales, un niño que según una juez no existe.
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