Dos analistas y un exvicepresidente coinciden en señalar que en la agenda nacional queda pendiente hacer el cierre político del referendo, diseñar una estrategia para enfrentar un escenario de crisis económica, atender el crecimiento de la deuda, la reforma judicial y un plan para enfrentar el cambio climático. Aseguran que pese a la importancia que tienen los temas citados, el Gobierno los relega o desatiende debido al revuelo ocasionado por la expareja del presidente Evo Morales, Gabriela Zapata.
Zapata está detenida por uso indebido de bienes del Estado, enriquecimiento ilícito y otros cargos. Los analistas Jorge Lazarte y Ricardo Paz y el exvicepresidente Victor Hugo Cárdenas señalan que falta capacidad para el manejo de crisis, tanto comunicacional como políticamente, además de autocrítica en el Gobierno.
Cárdenas, también exvicepresidente en el primer gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, explicó que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) es el encargado de hacer el cierre administrativo del referendo del pasado 21 de febrero, en el que se impuso el rechazo a la reforma de la Constitución Política del Estado (CPE) para que el actual binomio presidencial se repostule en 2019; pero el cierre político, dijo, se dará cuando el Presidente y el Vicepresidente del Estado manifiesten que aceptan ese resultado y que no serán candidatos en 2019, “algo que no han dicho hasta ahora y, al parecer, tienen la intención de desconocer el resultado (de la consulta)”.
La falta de atención a la crisis económica derivada de la caída de los precios internacionales de las materias primas es un tema en el que coinciden los tres analistas. Cárdenas puso como ejemplo que la caída de las exportaciones nacionales en poco más de 35 por ciento, reportada a enero, anticipa un escenario adverso y la reducción de ingresos es algo que se debe atender con urgencia. “No lo han hecho por dedicarse a la campaña (para el referendo)”, apuntó.
El experto en marketing político, Ricardo Paz, señaló que la prioridad en la agenda política del Gobierno era “reproducirse en el poder” hasta 2025. Una vez cumplida, con derrota de por medio, coincidió con Cárdenas en que, en la agenda pública nacional, la economía es un tema clave. “¿Cómo afrontar la época de vacas flacas? Es un tema más urgente y más importante”, afirmó.
Y otro tema relacionado con la economía que debe estar en la agenda nacional es el nivel de la deuda externa, según Cárdenas, quien cuestionó que el Gobierno acuda al endeudamiento.
En octubre de 2015, el Gobierno consiguió un crédito chino de 7.500 millones de dólares para la ejecución de obras que hará que la deuda externa de Bolivia suba del 17 al 35 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), explicó entonces el Vicepresidente. Añadió que llegar a un tope de 55 por ciento es “manejable”.
La reforma a la justicia es otro de los temas postergados. En enero pasado, Morales le puso fecha y lugar: 16 y 17 de abril en Sucre y propuso seis ejes para abordar. Sin embargo, al parecer no se realizará, según Cárdenas, pues además de la fecha se debe trabajar un temario a profundidad y una metodología, algo que no se hizo.
Lazarte, exvocal de lo que fue la Corte Nacional Electoral (CNE), dijo que el primer desafío del Gobierno en su propia agenda era organizar la cumbre de justicia, pero aparentemente no estaría trabajando lo suficiente en el tema, ya que surgieron críticas incluso desde el interior del poder judicial. El pasado viernes, el magistrado del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Jorge Von Borries, dijo que la cumbre judicial fijada para abril será “falsa” y se limitará al pedido de renuncia de sus colegas. Para Paz, este tema no fue priorizado y ve “descuido”.
La seguridad ciudadana y la lucha contra el narcotráfico son otros dos temas pendientes que añadió Lazarte.
Los efectos del cambio climático tampoco han recibido atención y la sequía en unas regiones e inundaciones en otras comenzó a generar problemas y complicaciones que pueden pasar factura, según Cárdenas.
Lazarte afirmó que el Gobierno está manejando una agenda que no es la suya ya que “carga” dos problemas vinculados entre sí que “están removiendo los cimientos del Gobierno y del MAS” y son la derrota del oficialismo en el referendo y un “muy extendido proceso de corrupción”.
Ante ese panorama, Paz señala que el Gobierno “cometió un gravísimo error al plantear el referendo antes de resolver los grandes problemas del país. Si lo hubiera hecho, probablemente el escándalo y los casos de corrupción no le hubieran afectado tanto”.
Ven fallas en manejo de crisis
Para el analista Victor Hugo Cárdenas es urgente que el Gobierno estructure al menos dos equipos, uno de seguimiento a las acciones planificadas por el Ejecutivo y otro para el manejo de crisis.
En el primer caso dijo que se hace evidente “que están improvisando”. “Falta seguimiento a la agenda gubernamental. Se conoció que el Presidente delegó al Vicepresidente (Álvaro García) encargarse de grandes proyectos, ¿para qué están los ministros?”, cuestionó.
Respecto al manejo de crisis o equipo de alerta temprana, señaló que lo ocurrido a raíz del caso Gabriela Zapata demuestra que “nadie pone línea” en el Gobierno y no sabe cómo encararlo. Aseveró que “se está hundiendo cada vez más en sus contradicciones” al intentar explicar lo sucedido o negarlo.
El analista Jorge Lazarte añade que el efecto del caso Zapata en el Gobierno fue tan grande que se percibe el “aturdimiento” y que hay una cacofonía sobre el tema, pues responde a ciegas. “Es una agenda que no previó”, porque no esperó sufrir una derrota en el referendo ni las consecuencias del escándalo en torno a Zapata.
“Evo fue la fuerza del MAS, ahora es su debilidad”
El analista Jorge Lazarte señala que el MAS aún “no tiene plan B”, en alusión a que aún no sabe quién puede reemplazar al presidente Evo Morales dentro el partido. “Él no es líder, es caudillo. El líder se puede reemplazar en un partido, los caudillos no son reemplazables”, explica.
En su análisis, Lazarte considera además que Morales, que fue la fuerza del MAS, es ahora la debilidad de su partido y que éste se convirtió en su propio problema; “pero se niegan a admitirlo, quieren evadir transfiriendo la responsabilidad a otros, culpando a otros” de sus problemas internos y de sus desaciertos como Gobierno.
Al conocer que el No en el referendo ganó con un poco más del 51 por ciento, Morales dijo que aceptaba el hecho; sin embargo, evitó hablar de quién sería su sucesor y posible candidato del MAS para 2019 y se limitó a señalar que ese tema será resuelto en ampliados de las organizaciones sociales.
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