Carlos Padilla fue enviado ayer por la tarde al penal de Palmasola, luego de una audiencia cautelar donde los representantes del Ministerio Público demostraron ante el juzgado que hay daños económicos a la municipalidad de Santa Cruz. Padilla, que se encontraba con arresto domiciliario, solicitó la audiencia para obtener su libertad, pero el fiscal Iván Ortiz demuestra su grado de complicidad en la compra del dron.
Juez dice que hay peligro de fuga. David Alfaro, que actúa como abogado de Padilla, solicitó al juez Mirael Salguero que su cliente sea apartado del caso, ya que según el jurista su defendido estaba liberado de culpa, toda vez que las últimas investigaciones del Ministerio Público indicaban que otra empresa compró el equipo del dron y camión de monitoreo. Alfaro evitó dar explicaciones a la prensa luego de conocer el fallo del juez, solo se remitió a señalar que van a apelar la decisión, pues consideran que es "injusta".
Se pagó antes que el equipo llegue al país. Mientras que el fiscal Iván Ortiz informó al juez que Padilla cobró 3,7 millones de bolivianos al municipio cruceño en fecha 26 de diciembre del 2014, por la compra de los equipos de seguridad y monitoreo; sin embargo, la investigación evidencia que el dron, de procedencia española, ingresa a Bolivia el 5 de febrero del año 2015. Ortiz recordó al juez Salguero que ya han pasado 3 años de haber comprado el equipo y este no ha sido entregado, tal cual lo exigen las especificaciones técnicas de la licitación.
Sospechan que 'Chichito' era un palo blanco. "Tenemos la convicción de que aquí ha habido delito", señaló el fiscal Ortiz al finalizar la audiencia. Anticipó además que se ampliará la imputación para incluir el delito de falsedad. El Ministerio Público indaga por qué se pagó anticipadamente por el equipo que llegó al país recién meses después. "El señor Padilla sería un palo blanco, un testaferro que solamente ha puesto su nombre", indicó Ortiz.
El pasado martes, la fiscalía allanó la empresa Westeco, que fue presuntamente la empresa que compró el dron a una firma española por 60 mil dólares, pero que no aparece en el proceso de contratación. "Estaríamos hablando de 30 mil dólares de sobreprecio", señaló Ortiz, debido a que la empresa Army Security, de Padilla, vendió el equipo a la alcaldía cruceña en 90 mil dólares.
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