El ministro de Defensa, Reymi Ferreira, tomó a su cargo el caso de la irregular compra de barcazas y reveló que el Gobierno boliviano necesita 15 millones de dólares para cancelar por el almacenaje de los bienes navieros, que hace más de cuatro años no pueden ser recuperados y que continúan en China.
La autoridad manifestó que se trata de un tema "delicado" porque el Gobierno tendrá que analizar la pertinencia o no de cancelar 15 millones de dólares "adicionales" por las 16 barcazas que se encuentran en un almacén en la República Popular China.
"Pero hay algunos temas económicos adicionales que habría que pagar, lo tenemos que estudiar porque es muy delicado. Inicialmente había que pagar 7 millones, pero ya ha subido a 15 millones, porque día que pasa el almacenaje genera costos adicionales", declaró la autoridad.
El ministro se reunió con el embajador de China en Bolivia para conversar sobre el tema y aunque dijo que existe predisposición para cooperar en una solución favorable para el país, pero se debe cumplir con los temas económicos.
Sin embargo, el año pasado, el ex ministro de Defensa, Rubén Saavedra, aseguró que la administración de Evo Morales no pagará nuevamente por las barcazas y remolcadores que ya canceló, generando un daño económico al Estado.
El 2009, Enabol suscribió un contrato con dos empresas coreanas para que construyan 16 barcazas y dos empujadores, y que debían ser entregadas en un año a cambio pagó por adelantado el costo total de los bienes y por el transporte de los mismos, 28 millones de dólares; pero las entidades contratadas subrogaron el contrato a otras compañías chinas. Las barcazas tienen una orden judicial para ser rematadas.
Ferreira reconoció que la situación de estos bienes genera un daño económico, porque día que pasa se pierden recursos económicos. De acuerdo al Decreto Supremo mediante el cual se dispuso la compra de los bienes, por la actividad de los remolcadores y barcazas ya deberían generar recursos económicos.
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