Julia Ramos, la exministra de Desarrollo Rural, habló con ANF desde el Centro de Orientación Femenina de Obrajes donde nunca imaginó llegar y desde donde ahora le toca hacer su defensa y no duda en lanzar espinosas preguntas sobre su correligionaria Nemesia Achacollo y el Fondo Indígena: ¿De qué privilegios goza (Nemesia Achacollo)? ¿Quién la protege? Si "ella era la responsable de todo", cuestiona.
La exministra, que hoy está detenida preventivamente en la cárcel acusada de un presunto daño económico de Bs 7,5 millones por aprobar ocho proyectos "fantasma" en su calidad de miembro del Directorio del Fondo Indígena y uno por ser presentante legal, se pregunta por qué Nemesia Achacollo no responder por su responsabilidad en el liquidado Fondo Indígena, el que dirigió durante cinco años.
"No sé de qué privilegios goza (Nemesia Achacollo). ¿Quién la protege? ¿Quién está detrás de ella?. Esa es mi pregunta y voy a seguir preguntando", manifestó Ramos quien atendió la llamada de ANF al teléfono del penal de mujeres. Interrogantes que también se hacen las integrantes de la Federación de Mujeres Campesinas Bartolina Sisa de Tarija.
La también exdirigente de la Confederación de Mujeres Campesinas Bartolina Sisa está segura que "otros deberían estar aquí (en la cárcel) y no están". ¿Quiénes son esos otros? le preguntamos; y ella responde: ¿Quién ha sido la MAE (Máxima Autoridad Ejecutiva)? Ella debiera estar (aquí) Nemesia Achacollo".
Explica que la exministra Achacollo, que renunció al cargo después de que la exinterventora del Fondo Indígena identificó un presunto daño económico de Bs 102 millones de bolivianos, era la cabeza del Ministerio de Desarrollo Rural y la presidenta del Directorio, la MAE, insiste.
Pero por alguna extraña razón que aún no encuentra respuesta, no es ésta la exautoridad que está asumiendo responsabilidades sino "los de abajo". "Ella era la MAE, ella era la presidenta, la cabeza, la responsable de todo, porque el Fondo dependía del Ministerio de Desarrollo Rural. Claro, ella debería estar aquí (cárcel) rindiendo cuentas, aclarando. Quieren agarrar a los de abajo", emplaza, pero con con una voz que se escucha calmada.
Criticó el papel que está jugando la Fiscalía y la administración de justicia que no valoró que tiene familia, domicilio y que podía defenderse en libertad "la verdad está detrás de la rejas y la mentira en las calles", manifestó. Y aseguró que demostrar su inocencia porque "Julia Ramos no se ha robado ni un centavo", dijo.
Contó que antes ya había prestado declaraciones sobre un proyecto y que en esa oportunidad no la aprehendieron, sin embargo ahora ampliaron la acusación en proyectos "fantasma". Ramos se presentó voluntariamente, pero cuando llegó a la Fiscalía cuenta que ya todo estaba preparado incluso su mandamiento de aprehensión.
Observó la posición del Gobierno "fácil es decir caiga quien caiga, pero hay que saber escuchar. No es decir ya nomás te aprehendemos y te metemos adentro (a la cárcel) (…) ¿Por qué no traen a los responsables", insistió con los cuestionamientos sobre los hechos que giran en torno al Fondo Indígena.
Al igual que Ramos, en su misma situación se encuentran la presidenta de la Cidob, Melva Hurtado, el dirigente campesino, Remy Vera; los senadores Jorge Choque y Felipa Merino con detención domiciliaria y arraigo y el líder campesino Damián Condori.
Ramos fue ministra de Desarrollo Rural en la gestión 2009 y el 2010 participó del Fondo en su calidad de dirigente de las "Bartolinas".
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