La testigo Jeimmy Delboy Callaú declaró que el exrector de la universidad estatal y ahora Ministro de Defensa, Reymi Ferreira, y el gobernador Rubén Costas iban a reuniones del denominado grupo La Torre. La fiscalía vincula a esta organización con el grupo de Eduardo Rózsa.
Otto Ritter, abogado defensor del general Gary Prado Salmón, recordó a la testigo que en su declaración mencionó haber visto a Costas en la casa de campaña, por lo que le preguntó si en ese entonces ya ejercía la función de prefecto. La respuesta de Delboy fue: Sí era, creo en ese momento. Se trató de que se diga más sobre él. Quería que amplíe cosas, que fue siempre. Yo dije sí fue.
Ritter también le preguntó si Ferreira había asistido a la denominada casa de campaña. Delboy respondió de forma afirmativa. "En ese entonces yo estudiaba y él era para mí un líder. Sí, recuerdo que una vez visitó la casa de campaña", fueron sus declaraciones.
También aseguró que asistían medios de comunicación y otras personalidades invitadas. La testigo agrega que su entonces jefe, Luis Orlando Justiniano, le comentaba que ingresaban a reuniones de "análisis políticos".
Delboy forma parte de la lista de 43 testigos que presentó el Ministerio Público, dentro del polémico caso Rózsa. Los fiscales concluyeron su interrogatorio la mañana del martes.
Revelaciones. A la interrogación del abogado Gary Prado Araúz, sobre las presiones que había recibido y las circunstancias en las que se registraron, la testigo Jeymmy Delboy declaró que en los caso Terrorismo I y II fue presionada y obligada a inculpar a otras personas en la investigación del proceso.
Afirmó que cuando le tomaron declaración, el exfiscal Marcelo Soza la habría presionado para que diera nombres para ser involucrados en el caso.
"Fueron tres veces, la primera fue el fiscal Soza, cuando me tomaron la primera declaración... Todo el tiempo repetían palabras técnicas que si no colaboraba tenía que buscar personas que puedan dar fianza. O sea, yo no tenía dinero. Entonces me decían que ellos sabían todo, que yo únicamente tenía que decir personas y personas. Y me nombraban y me decían que esas personas ya habían dicho que estaban ahí y que yo tenía que decir que sí, si no me iba a ir presa", dijo en su declaración
"Soza me dijo que si me había llevado una colchita para quedarme presa", detalló Delboy ante el Tribunal de Sentencia dirigido por Sixto Fernández.
La declarante señaló que dentro de la investigación del caso Terrorismo II, el exfiscal Harry Suaznábar la amenazaba de la misma forma, para que dé nombres a cambio de no ser aprehendida. "La segunda vez que se me llamó a declarar fue con el fiscal, un chiquitito, Harry Suaznábar, que desde el comienzo me decía que me iba a meter presa... Me decían que yo tenía que pedir una ampliatoria. Que ni siquiera tenía que responder porque solo tenía que firmarla (su declaración). Le dije que no podía hacer eso, porque no le iba a fregar la vida a tanta gente, si ya yo había visto lo que estaba pasando", añadió.
Incidente. Producto de todas estas preguntas lanzadas por la parte de la defensa de los imputados en el caso, los fiscales sostuvieron fricciones con miembros del Tribunal Primero de Sentencia, principalmente con la juez ciudadana Sonia Mamani.
El fiscal Céspedes objetó todas las preguntas tratando de impedir que se dé vía libre a la respuesta de Delboy, mientras que los jueces dieron lugar al interrogatorio de la defensa de los imputados.
Ante esto, el fiscal Céspedes sindicó a Mamani, de influir en la decisión de la otra jueza ciudadana, Anastasia Calizaya, quien finalmente con voz firme le respondió que jamás ha recibido lecciones de cómo votar.
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